martes, 22 de octubre de 2013

Un desierto que me hizo amar a Dios

Hace un tiempo atrás, tuve una experiencia muy fuerte, un desierto que me hizo amar a Dios.
.-``Una vez mire para mis compañeras de colegio, y vi algo diferente en ellas, algo que las permitía divertirse a su gusto y sin que nadie si lo impidiese; quería ser como ellas; empecé a vestirme de manera diferente (sólo para ir al colegio), a hacer lo que ellas hacían, empecé a hablar como ellas hablaban, a escuchar la música que ellas escuchaban, ya que solo quería agradarlas; ya no oraba, no leía la Biblia, no ayunaba; pero cuando llegaba la hora de ir para la iglesia, yo me comportaba diferente, como si nada estuviese pasando; hasta incluso me quise alejar de la Casa de Dios, nadie sospechaba nada, más yo tenía todo preparado, en cuanto encontrara una brecha que me de la oportunidad de irme la iba a aprovechar.
Más una día, una voz me habló que me dijo así -"Yo jamás te abandonaré, hagas lo que hagas, siempre estaré a tu lado, no te dejaré ni te desampararé, te llevaré de Mi mano y no te soltaré, porque Yo te amo con AMOR ETERNO". Después de oír ésto, me dí cuenta de lo gran equivocada que estuve, y lo tonta que fui al pensar a abandonar al único que me amaba de verdad, al que no me iba a abandonar, que siempre estaría conmigo. En ese mismo momento me humille delante de Dios, le pedí perdón por todo lo que había hecho, por haber intentado agradar a los demás, cuando lo tenía que glorificar a Él. Ésa noche hice un pacto con Dios, y le dije -"Así como Tu Palabra es fiel, yo haré la mí también, no te defraudaré, estarás orgulloso de mi".
Mi vida a partir de ése momento dio un giro de 180 grados; jamás volví a hacer la misma, cambié y sólo para que en mi vida sea glorificado el nombre de Aquel que me creó y me amó sin aun yo conocerlo.

Hoy mi vida es sólo para agradar a Dios, estoy dentro de la obra del Señor, vivo para hacer Su voluntad.
Mi postura es de sierva de Dios, y nunca la voy a abandonar. Mi placer es agradarlo a Él, y sólo a Él.
Le doy gracias a Dios por todo lo que hizo por mi, por haberme abierto los ojos, y por nunca haberme abandonado.

"Y Jesús le dijo: nadie, que hace uso del arado y mira atrás es apto para el Reino de Dios."  (Lucas 9:62)

Usted que ya pensó en desistir, y mirar para atrás, déjeme decirle que no es una muy buena decisión, usted debe ser sabia y pensar en su Salvación, mire si Jesús viene cuando a usted se le da por abandonar todo y hacer lo del mundo. No permita eso, no se aleje de la presencia de Dios, porque sólo Dios tiene lo que usted necesita (paz, alegría, amor, felicidad, vida eterna).

Que Dios bendiga a todas ustedes!!

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